Según la Institución, el uniformado aprovechó que había ido a Cesar a buscar una patrulla, para meter allí la droga con destino a Riohacha.
Un Policía adscrito a la regional de La Guajira, fue capturado en las últimas horas en la carretera que comunica a Riohacha con el municipio de Barrancas, cuando se encontró en la patrulla policial que estaba conduciendo, un alijo de clorhidrato de cocaína que superaba los 100 kilogramos y que al parecer pretendía llevar hasta la ciudad de Riohacha.
La información sobre este operativo en contra de los grupos de narcotraficantes fue entregada por el mayor general Julio Cesar González Bedoya, oficial que está en la dirección de la Regional # 8 de la Policía Nacional, quien indicó que el policía había salido de La Guajira a Valledupar, ciudad donde recogería un carro patrulla que estaba en reparación, la cual debía conducir a Riohacha para ponerla a disposición del comando.
El día miércoles los policías habían instalado un puesto de control entre la cabecera municipal de Barrancas y su corregimiento Papayal para hacer la rutina de control de todos los días.
Sin embargo, uno de los policías notó algo raro en la presentación del uniformado y le pidieron que abriera las puertas de los depósitos encontrando allí la carga del ilícito material estupefaciente.
Cuando los Policías terminaron de sacar las ‘panelas’ prensadas que contenían el clorhidrato de cocaína y lo pusieron sobre una báscula, el peso exacto arrojado por la máquina fue de 144 kilogramos.
Después procedieron a iniciar la judicialización del conductor, de quien se dijo es el policía activo adscrito al grupo de movilidad de la institución Kevin Rafael Valdeblánquez Otero.
A este joven policía le leyeron los derechos del capturado y le anunciaron que lo presentaran ante un fiscal con la presunción del delito de fabricación y porte de estupefacientes.
Además, el servidor público podría ser imputado por haber utilizado un bien del Estado como es el carro patrulla, para cometer o facilitar la comisión de un delito.
La Policía de La Guajira, fue clara al indicar que esta investigación apenas comienza y no descartan que otras personas, que pueden o no ser de la misma institución, también estén involucradas en el delito de narcotráfico.
Sobre el sitio en el que se cargó la droga a la patrulla, los policías del servicio de inteligencia no han logrado establecerlo, pero sostienen que hay indicios de que no fue en el taller donde se hicieron las reparaciones del carro, y entonces queda la posibilidad de que los 144 kilos de clorhidrato de coca hubieran sido cargados en otro sitio de la ciudad o incluso, en alguna de las veredas o casas que se encuentran en la carretera.