Tres de los integrantes de la familia murieron en una misma semana.
Colombia atraviesa por uno de sus peores momentos generados por la pandemia del Covid-19, con la alta ocupación de camas UCI, el récord en número de muertes diarias a causa del coronavirus y más de 25.000 casos de contagios diarios.
A esto se le suma la incertidumbre por la llegada de nuevas variantes desconocidas y el ritmo lento de vacunación en algunas regiones del país.
El Santa Marta la comunidad se ha visto conmocionada por el caso de la familia Riatiga, donde el virus tocó la puerta y no quiere salir.
Un total de 10 miembros del núcleo familiar han muerto a causa del covid-19.
De estos, tres fallecieron en el transcurso de apenas una semana y los otros, uno a uno, fueron falleciendo a lo largo de la pandemia por las complicaciones médicas derivadas del contagio.
El último en haber perdido la batalla contra el virus fue un hombre, de 30 años.
“Lo de ellos le ha dolido mucho a la familia, ha sido una pérdida grandísima para todos. Iván era un hombre muy especial, lleno de talento. Le gustaba escribir y componer”, manifestó Paola Díaz, familiar de los fallecidos, a ‘Noticias Caracol’, añadiendo que “mi hermano era un joven que hacía todo lo que le decía el médico”.
En medio del relato, asegura que algunos de ellos fueron asintomáticos y no sintieron nada, sin embargo, las complicaciones llegaron después.
“Muchos fueron asintomáticos y no les dio nada. Es algo de las circunstancias que cada uno ha tenido que vivir para enfrentar al covid-19”, dijo la mujer al medio ya citado.
Además, acotó que, “siento un dolor profundo, porque este año mi hermano había logrado muchas cosas, sentía que era su año. Tengo impotencia, rabia con el personal médico”.
A finales del mes de junio, la familia había denunciado sobre la muerte de 8 familiares: seis hermanos, un primo y un tío. Hasta ese momento Holmes, de 52 años, era el más joven de los fallecidos de esta familia. Sin embargo, el virus siguió causando estragos y ahora se llevó a uno de los más jóvenes.
“Unos hermanos que toda la vida estuvimos juntos compartiendo momentos agradables y todo, y de un momento a otro con esta pandemia del covid se los ha llevado. Nos los arrebató sin decir ni hasta luego”, dijo Edilberto a El Tiempo a finales de junio.