Los datos entregados por la autoridad departamental parecen adelantarse al reporte oficial.
A través de sus cuentas personales en internet el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, día a día entrega un informe detallado del estado de los pacientes confirmados con Covid-19, pero tales cifras no concuerdan con el informe oficial del Instituto Nacional de Salud (INS).
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Algunos intems de su listado muestran diferencias, pese a que el Ministerio de Salud precisara el pasado 6 de marzo que no era menester de los gobiernos locales entregar información estadística de los casos.
En un paralelo de ambas cifras, parece que el gobierno de Caicedo va un paso más allá de las calibraciones que el organismo sanitario entrega todos los días. Reporta datos aun cuando el INS no los precisa. Esta disparidad en las estadísticas preocupa a la población magdalenense que parece vivir en un limbo informativo cada vez que Minsalud da las cifras.
A corte de 13 de abril, el Gobernador reporta 58 casos en Santa Marta, 5 en Ciénaga, 1 en Fundación y 1 en la Zona Bananera, para un total de 65 infectados. Mientras que el INS habla de 59 en la capital, 6 en Ciénaga y un fallecido en la Zona Bananera, siendo 66 en general.
Las cifras de decesos también muestran contradicciones matemáticas, el informe de la gobernación tabula 8 muertes por Covid-19, mientras que el INS indica 5, 4 en la capital de personas con 88, 96, 65 y 75 años; y 1 en la zona municipal, paciente de sexo masculino de 76 años.
Otra diferencia son los pacientes recuperados, Caicedo Omar reporta 6 personas, mientras que el Instituto de salud habla solo de 1, una mujer de sexo femenino con 50 años de edad.
No se precisa, además, si los cálculos de las cuentas del gobernante sean casos de personas actualmente activas y aunque sea este escenario las restas y sumas no dan, pues, 65 pacientes vivos más los 8 muertos, dan 73, es decir, 8 más que los informados por el INS, lo cual descartaría la hipótesis.
Sin embargo, a pesar de la diferencia en las cifras, ambos listados muestran una realidad difícil que afronta el Departamento, que convierte en uno de los más golpeados a nivel nacional por el coronavirus.