Durante el procedimiento también fueron detenidos un sobrino del mandatario y un gran amigo.
Este lunes se conoció un claro ejemplo del verdadero ejercicio de autoridad, el alcalde de Juan de Acosta, Carlos Higgins, no dudó en trasladar a una estación de Policía a su hijo, Carlos Manuel, al sorprenderlo ingiriendo licor en compañía de un sobrino y un amigo.
El mandatario, según BLU Radio, atendió el llamado de ciudadanos que hicieron la denuncia a través de redes sociales y acudió en compañía de la Policía hasta la casa donde se encontraba su hijo en estado de embriaguez.
“Quien infrinja el toque de queda y la ley seca lo vamos a judicializar sea familia, sea hijos, sobrino, amigo. Esto tiene un solo objetivo que nos cuidamos, que nos quedemos en casa, no están permitidas las parrandas ni las reuniones sociales”, enfatizó.