El personal médico y administrativo que lo cuidó durante tres años le dio un sentido homenaje de despedida.
Como un héroe, así fue despedido el adulto mayor que por más de 3 años fue cuidado y atendido por el personal médico y administrativo de la clínica La Milagrosa.
El abuelo, había quedado a cargo del personal médico, luego que su familia se desentendiera de él y lo dejara a su suerte en el centro asistencial.
Cipriano Montealegre, murió a sus 70 años murió, tras resultar contagiado de Covid-19.
Este hombre de nacionalidad venezolana se ganó el cariño de los empleados del centro médico, quienes con amor y dedicación lo cuidaron hasta el último día de su vida.
“Es muy triste su partida, fue un señor que se ganó el afectó de todos, nos duele mucho que ya no esté. Así como hace un año le celebramos su cumpleaños, hoy unimos esfuerzos para darle una gran despedida y para pagar a la funeraria y que fuera cremado”, contó a Santa Marta Al Día una trabajadora del centro médico.
Abordo de una carroza llena de flores y con una calle de honor, el personal médico y administrativo le dio el último adiós al abuelo más querido de la clínica.
“Nos duele mucho que Cipriano ya no esté con nosotros, se enfermó de coronavirus y esta enfermedad se lo llevó. Solo pedimos que descanse en paz”, puntualizó.
Cipriano murió lejos de su familia que sin piedad lo dejó solo en una clínica lejos de su país de origen, pero rodeado del amor y cuidado de muchos desconocidos, que para él fueron sus nietos, sobrinos o simplemente familiares que la vida le regaló.