El Covid-19 ha cobrado muchas vidas a nivel mundial, situación que debe ser de mucho cuidado para las personas contagiadas, pero a esto se suma un factor de riesgo más, la obesidad.
Según el editorial publicado en la revista médica The British Medical Journal, con investigación de la Universidad Queen Mary de Londres, la obesidad puede alterar la respuesta inmune al Coronavirus, debilitando las defensas del paciente y aumentando la producción de una acelerada cantidad de citoquinas, que son proteínas que coordinan la respuesta del sistema inmunológico.
Sin embargo, el estudio señala que una respuesta descontrolada de las defensas del organismo ante el virus es una de las formas en que el coronavirus llega a producir la muerte.
Asimismo, afirman que una de las posibilidades de la relación entre la obesidad y el COVID-19 es la expresión de la enzima ECA2, que es la proteína que el virus utiliza como puerta de entrada en las células humanas y que es más abundante en las personas con sobrepeso.
El editorial asegura que el tejido graso podría ser también un almacén en el que se acumulan los virus antes de comenzar a extenderse a otros órganos y que la obesidad también entorpece el funcionamiento de los pulmones y hace más difícil ventilar a estos pacientes cuando requieren de cuidados intensivos.
Los médicos de la Universidad Queen Mary hacen un llamado a lasindustrias alimentarias de todo el mundo y a los gobiernos para dejar de promover y reformular inmediatamente los alimentos y bebidas no saludables.