A través de un comunicado a la opinión pública, Robinson Morelo, respondió a varias publicaciones hechas a través de portales digitales en las que se aseguraba que era deudor de millonarios recursos por infracciones de tránsito.
Frente a dichas aseveraciones, Morelo respondió que desconoce el origen de dichas infracciones y que no es sano que las mismas sean tomadas como herramientas de discusión política.
Dijo que ser infractor por una fotomulta no se tipifica en un delito frente a la Administración Pública, actos de corrupción, ni punibles, ni faltas disciplinarias.
ESTO DIJO MORELO EN EL COMUNICADO
En un medio de comunicación digital de la ciudad de Santa Marta, en la mañana del día Martes 13 de Agosto del presente, pretendiendo enlodar la imagen positiva que hemos venido proyectando en esta campaña a la gobernación, la cual vengo haciendo sin polarización, sin odios y sin señalamiento alguno al resto de candidatos que compiten por llegar a la primera magistratura del Palacio Tayrona, me endilgaron el epíteto: “el candidato que más debe fotomultas”, por supuesto exceso de velocidad en la malla vial de la ciudad de Barranquilla, territorio que no habito y llego con muy poca frecuencia.
Frente a lo anterior, manifiesto que hasta la fecha desconozco los orígenes de este tipo de infracciones de tránsito, las cuales no me han sido aún notificadas formalmente. Si bien es cierto el vehículo con el cual aparece el registro de un presunto exceso de velocidad, es de mi propiedad, no es menos cierto ni está probado que yo fuese la persona que lo estuviese conduciendo. La Ley de Tránsito establece que este tipo de infracciones deben ser controvertidas en el marco de un debido proceso administrativo, a través de una audiencia de descargos y posteriormente establecer la responsabilidad o exoneración de la misma.
Por fortuna este tipo de infracciones no se asemejan a delito alguno frente a la Administración Pública, actos de corrupción, ni punibles, ni faltas disciplinarias que enloden mi buen nombre, ni mi carrera política. Muy a lo contrario, es una situación administrativa que en caso de probarse se subsana pagando la multa respectiva y no a través de la privación de la libertad o destitución de cargo como servidor público como podría darse frente a otras personas que hoy están seriamente cuestionadas por la justicia y órganos de control.
Hago un llamado respetuoso, al medio de comunicación que publicó de manera poco objetiva la noticia, a efectos de consultar la veracidad y contrastar los hechos y esperar que se surta el debido proceso administrativo y no magnificar un tema particular que se torna intrascendente frente a la contienda electoral en el cual está en juego el futuro y el desarrollo de nuestro territorio frente a los graves problemas históricos que viene padeciendo y que hemos propuesto transformar de fondo.
Seguiremos avanzando con el esfuerzo, el trabajo sencillo, buscando ganar el voto de opinión de la mayoría de los magdalenenses, porque, así como se llega, se gobierna.
