El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF en lo que va del año 2018 ha atendido en el departamento del Magdalena un total de 389 casos de niños, niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual.
Esta cifra además de ser alarmante es la más alta de todo Colombia, lo que obliga a las autoridades y padres de familia a tomar medidas más efectivos para proteger a la niñez. “Es un panorama preocupante el que afrontan los menores de edad en esta región y en el país en general, de ahí el compromiso del Gobierno de endurecer las penas contra quienes cometan todo tipo de flagelos contra la niñez”, Señaló la directora del ICBF Juliana Pungiluppi, en su visita a Fundación, donde acompañó el sepelio de la menor que fue asesinada por parte de un camionero.
La tasa de abusos sexuales la representan 30 casos por cada 100.000 habitantes, ubicándose en un deshonroso primer lugar por encima de Cesar y Huila con 29 y Bogotá con 27. Pungiluppi lamentó el hecho de violencia registrado en el municipio de Fundación e hizo un llamado a los padres de familias a ejercer mayor vigilancia sobre sus hijos y confiar lo menos posible en personas desconocidas.
“La mayoría de los abusadores sexuales de nuestros niños, niñas y adolescentes están en sus entornos más cercanos, por ello debemos ser mucho más cuidadosos, saber de quienes se rodean y las actividades que acostumbran, de esa manera podremos evitar muchos riesgos que les rodean”, agregó.
La funcionaria nacional atendió directamente el caso de la niña de nueve años asesinada y delegó un equipo especializado, para que asista a su familia a partir del momento difícil que enfrentan. “Le dejamos claros que estamos aquí pendiente de su recuperación y desde el orden central trabajando en políticas muchos más severas que impidan que casos como estos se repitan en el país”, indicó.