Organismos y embajadas rechazan las amenazas, secuestros, extorsiones y reclutamiento forzado que provocan desplazamiento y confinamiento de las comunidades indígenas.
Varias delegaciones de la comunidad internacional atendieron el llamado de los pueblos ancestrales de la Sierra Nevada de Santa Marta en su clamor por la protección de sus derechos fundamentales y defender la paz en sus territorios, afectados por la incidencia de grupos armados no estatales.
Durante dos días, representantes de la ONU, las embajadas de Inglaterra, Estados Unidos, Irlanda, Unión Europea, Noruega; y la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos en Colombia, CINEP, CCAJAR y la Defensoría del Pueblo se reunieron con los líderes de la comunidad Wiwa que los invitó a conocer la situación de violencia y riesgo que enfrenta por el escalamiento de la violencia contra cuatro pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
La embajada de los Estados Unidos instó a actores ilegales a que deben respetar los derechos humanos y la vida de esta comunidad indígena. “Rechazamos la violencia y las amenazas contra este pueblo de parte de varios grupos armados en el territorio. Es inaceptable que haya amenazas, secuestros extorsiones, que la comunidad siga desplazada y confinada por parte de esos grupos”, expresó el delegado de la representación norteamericana.
A su vez, la delegada de la embajada de Irlanda, Louise Wilson, indicó que también participaron en reuniones con el gobierno local para llevar estas preocupaciones particularmente afectaciones a las mujeres y a la niñez de este pueblo, con el fin de apoyar la paz y los derechos humanos. “Vamos a seguir llevando estos mensajes al gobierno nacional y dando visibilidad a esta situación muy preocupante para este pueblo y los demás pueblos en la Sierra Nevada de Santa Marta”, aseveró.
Durante el encuentro con los delegados internacionales, los Wiwas ratificaron que son un pueblo en paz y de pensamiento. “Cuidamos lo que está debajo y encima de la tierra. Somos parte del Estado. Estamos en defensa del territorio, del árbol, del aire, del agua y no de la minería”, expresaron sus autoridades.
Entre tanto, las mujeres de esta etnia piden a las autoridades locales y nacionales contar con una casa adecuada para la atención digna de las víctimas de violencia sexual y basada en género, además de medidas urgentes de prevención y protección.