El numero de contagiados por Covid-19 cada día va en aumento en el país, y a esta preocupación se suman otra más, la posible escasez de personal de la salud, para atender la Unidad de Cuidados Intensivos.
El país, reporto el viernes por primera vez más de 200 muertos por el virus y casi 7.000 nuevos contagiados. A la par de las 7.415 camas de ciudados intensivos instaladas a nivel nacional se encuentran disponibles 2.547 (el 34,34 %), y departamentos como Nariño –que ya declaró la alerta roja hospitalaria–, así como Norte de Santander, Valle del Cauca y Bogotá ya están con niveles de ocupación por encima del 80 por ciento.
Y si bien en este proceso de adaptación el país emprendió una carrera para la compra de ventiladores con una meta puesta en 10.000 camas de UCI, el tema del personal sanitario para manejar estas unidades empieza a preocupar, bajo la premisa de que estos profesionales requieren una elevada capacitación y formación.
José Luis Accini, presidente de la Asociación Colombiana de Medicina Crítica y de Cuidado Intensivo (Amci), afirma que Colombia hoy tiene cerca de 1.200 intensivistas, de los cuales mil se dedican a los adultos y el resto, al manejo pediátrico. Este total de profesionales antes de la pandemia estaba distribuido en 5.346 camas de 380 UCI.
A juicio del especialista, con el crecimiento a 7.415 camas es claro que esta ecuación empieza a tener desequilibrios significativos.
Pero el asunto va más allá, porque los médicos intensivistas no son el único talento humano que empieza a escasear, porque las UCI requieren de profesionales de varias disciplinas también especializados.
Por ejemplo, un hospital que recibió 14 camas nuevas de UCI tuvo que ampliar este personal en dos médicos intensivistas, cuatro jefes de enfermería, cuatro auxiliares de enfermería, dos terapeutas y un auxiliar administrativo, más el personal de servicios generales.
Si quiere hacerse una inferencia sobre este ejemplo, queda claro que algunas UCI se quedarían sin intensivistas o se tendría que alterar de manera preocupante la proporción de 10 camas por médico intensivista por jornada, aclarando que es una de las áreas hospitalarias que requieren atención las 24 horas, argumenta Accini.
En el cálculo más austero, de acuerdo con Pedro Cifuentes, administrador de sistemas de salud, en un hospital con 10 camas UCI y con turno de 12 horas, que ya es pesado, se necesitarían dos intensivistas. Y en el objetivo de tener 10.000 de estas unidades tendría que al menos duplicarse el recurso actual de intensivistas, para ponerlo por encima de 2.000.