En la despedida también hubo camiones, tamboras y hasta juegos pirotécnicos.
La violación de la cuarentena para evitar la propagación del Covid-19 una vez más se vio evidenciada en el multitudinario sepelio que realizaron en Taganga. En el que todos los protocolos de seguridad fueron incumplidos.
De acuerdo con las autoridades por esta época solo 10 personas están autorizadas para asistir a los funerales, pero esta cifra no fue tenida en cuenta y sin importar las consecuencias más 200 personas acompañaron el féretro de un miembro de la comarca de pescadores.
El hecho que quedó registrado en un video se habría presentado el pasado viernes cuando familiares, amigos y conocidos le daban el último adiós a conductor de carrotanque de agua potable, Orlando Rivera, que fue arrollado por una tractomula a la altura del barrio Bulevar del Río, en la vía Alterna al Puerto.
Para ponerle límites a la despedida en la que también hubo camiones, tamboras y hasta juegos pirotécnicos, fue necesaria la presencia de más 50 hombres de la policía. Si bien es cierto esta persona no falleció por cuenta del Covid-19, la aglomeración de tantas personas se convierte en un peligro foco de propagación del virus.