Un nuevo cisma institucional se abrió el domingo en Venezuela. Los diputados chavistas votaron como presidente del Parlamento a un casi desconocido Luis Parra, mientras las fuerzas policiales impedían a golpes acceder al hemiciclo a Juan Guaidó, reelegido horas después como líder de la cámara en la sede del diario El Nacional.
El Palacio Legislativo amaneció tomado por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), quienes incluso impidieron a numerosos periodistas ingresar al recinto de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento).
Diputados chavistas de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) eligieron como presidente del organismo a Luis Parra, antiguo miembro del partido Primero Justicia, en un breve debate al que no llegó Juan Guaidó, retenido durante horas por la Policía en los alrededores del Palacio Legislativo.
El diputado de mayor edad presente ejerció como presidente temporal de la sesión antes de la elección de Parra que el equipo de Guaidó calificó como un “golpe al Parlamento”, puesto que quienes lo eligieron lo hicieron “sin votos ni quórum”.
Antes de la sesión del domingo, esperada desde hace meses como un nuevo pulso entre Gobierno y oposición, los alrededores del Palacio Legislativo fueron tomados por la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), que pusieron numerosos controles tanto a Guaidó como a otros diputados que lo acompañaban para el ingreso.
En esos controles retuvieron al hasta hoy presidente de la AN mientras que tanto los diputados oficialistas como un pequeño grupo opositor, tachados como corruptos por la mayoría de quienes están en contra del Gobierno de Nicolás Maduro, pudieron ingresar sin problemas.