Alejandra Molina, de 30 años, falleció en su domicilio, mientras la menor, murió camino a un hospital.
Tristeza, rechazo e indignación causó en la comunidad latina de Estados Unidos el brutal asesinato de la colombiana Alejandra Molina, de 30 años, y su hija de 14 años, a manos, al parecer, de la expareja de la mujer.
Los hechos se registraron este domingo a las 8:55 en el bloque 14000 de Riveredge Drive.
La Policía de Tampa informó que en Alejandra murió de manera inmediata, mientras que la menor, quien intervino para salir en defensa de su mamá, falleció cuando era trasladada a un centro asistencial.
La familia y los testigos señalaron que el autor del doble feminicidio sería la expareja de Alejandra, identificado por las autoridades como Jean Pierre Ojeda, de nacionalidad peruana.
Daniel Molina, primo de Alejandra, narró que ella vivía en Estados Unidos con sus dos hijas y que se había dejado de Ojeda.
Sin embargo, los vecinos dijeron que la escucharon discutir con el hombre, de nacionalidad peruana.
“Él la buscó de nuevo y se quedó esa noche donde vivía. Al otro día, en la mañana, ella se fue alistar para irse al trabajo y resultó apuñalada. (…) La niña fue a buscar a su mamá para ver qué estaba pasando y, desafortunadamente, también la apuñaló en múltiples veces”, contó Daniel en entrevista para WRadio.
“Él se llama Jean Piere Ojeda, tengo entendido que es peruano, ellos ya se habían alejado, él trabajaba en el Estadio de Tampa, allí se conocieron (…) No teníamos conocimiento de alguna situación sospechosa o de alerta, solo que esa relación ya había terminado, pero él la seguía buscando”, agregó.
También contó que Alejandra, como la mayoría de migrantes que llegan a Estados Unidos, buscaba una mejor calidad de vida para ella y sus dos hijas.
“Quería darles un futuro a sus dos hijas, ya tenía empleo y le estaba yendo bien. Ahora solo queda una de las dos, con su padre, con quien estaba al momento del asesinato”.
Ojeda es buscado por la Policía de Tampa.
