Eduardo Hernández, un campesino de Abrojal, Cotorra, es el mayor comilón de arroz en el departamento de Córdoba. Sin prisa devoró seis libras del apetecido cereal, en el marco del Festival Cultural del Arroz Colorado que se realiza en Los Cedros, municipio de Cotorra.
Se sentó en la tarima, junto a diez competidores más, y pidió la primera libra de arroz, preparado con achiote y ají para mejorar el sabor. Se la trajeron pesada en una totuma y luego de mirarla fijamente empezó la faena, hasta desaparecer el último grano.
El ritual se repitió en seis oportunidades, libra tras libra de arroz consumida, implicaba la renovación de la dosis. A su lado, sus contendores se iban retirando cuando sentían que el estógamo se les iba a explotar.
Quedó solo en la tarima en medio de aplauso de dos mil personas que lo observaban. Por un momento pensó en seguir comiendo con el fin de superar el récord impuesto por Evangelista Roatán, el hombre del estómago de acero, quien en ese mismo concurso en años anteriores se ha comido siete libras y media más cuatro onzas de arroz colorao.
El segundo lugar fue para Alcides Atilano, quien se comió cinco libras y media de arroz, un poco menos de lo que ha consumido en oportunidades anteriores en donde había ocupado el tercer lugar.
La tradicional fiesta cordobesa ha ido ganando aceptación con el paso de los años por el tradicional concurso. En grandes calderos las mujeres de la región preparan hasta cien libras del cereal que después se devoran los concursantes en medio de la euforia del público asistente.