El hecho se presentó cuando la Procuraduría visitaba el Hospital Claren Lynd Newball.
La unidad de cuidados intensivos del recién inaugurada en la isla de San Andrés se inundó con un fuerte aguacero que cayó este jueves en medio de la visita de la procuraduría.
Los funcionarios del Ministerio Público registraron en videos la grave situación en toda la infraestructura del centro médico e hicieron un llamado a las autoridades para que entreguen un servicio de calidad a más de 79.000 residentes y visitantes de la isla.
Las imágenes dejan ver cómo grandes cantidades de agua se filtran por las lámparas en el techo, provocando un riesgo adicional de un corto eléctrico.
Lo más grave es que el personal de salud parece no estar sorprendido por esa situación.