Hombre trabajador y querido en la comunidad de Plato, Magdalena, tomó la decisión de acabar con su vida. Su hermana, con quien vivía, fue quien encontró el cuerpo al regresar a casa.
En horas de la mañana en el barrio El Bosque, en el municipio de Plato, Magdalena, un adulto mayor identificado como Andrés Bolaños fue hallado sin vida por su hermana, con quien compartía techo y momentos cotidianos.
La tragedia ocurrió en la mañana del martes, cuando el hombre, de oficio jornalero, le pidió a su hermana que saliera a comprar el desayuno para ambos.
Lo que parecía una simple rutina se transformó en una dolorosa despedida. Mientras la mujer salía brevemente de la vivienda, Bolaños aprovechó la soledad del momento para atarse un cordón de zapatilla al cuello y terminar con su vida. Al regresar, su hermana encontró el cuerpo sin signos vitales, tendido en el suelo, con la cuerda aún en su cuello.
Impresionada y sin comprender lo ocurrido, la mujer relató que jamás imaginó un final así para su hermano.
“Nunca mencionó problemas, ni se le veía mal. No tenía enfermedades ni mostraba signos de depresión”, afirmó entre lágrimas.
Andrés Bolaños era un hombre tranquilo, conocido por su labor diaria en fincas cercanas y por su carácter reservado. No dejó hijos ni otros familiares cercanos, más allá de su hermana, quien era su compañía.
Las autoridades hicieron presencia en el lugar para realizar el levantamiento del cuerpo y adelantar los procedimientos de rigor.
