Los costos de estos productos han incrementado hasta un 50%.
Un verdadero viacrucis vive el gremio de pescadores de Taganga, quienes a diario salen de sus viviendas con chinchorro, caña de pescar, anzuelos y la ilusión de lograr una buena faena para poder abastecer a los samarios durante la Semana Santa.
Pero desafortunadamente está sucediendo todo lo contrario. De acuerdo con Julio Ángel, pescador de la bahía del corregimiento antes mencionado, a pesar que sus jornadas a mar adentro duran más de 12 horas, no están logrando pescar lo suficiente para solventar los gastos de las lanchas.
“Hace algunos años Semana Santa era una época bendita para nosotros, donde había subienda de peces y podíamos venderlos a precios cómodos. Ahora, nos ha tocado incrementar los costos y la gente ha dejado de comprar contantemente”, indicó Julio Ángel.
La ausencia de este alimento durante esta temporada tan importante para su comercialización, se debe a los fuertes vientos, los cuales estarían ahuyentando a los peces que sirven para atraen una mayor variedad de productos marinos, según manifiesta la comunidad.
“Los vientos alisios y los frentes fríos, han hecho que pescados como el bonito, medregal, pargo, entre otros, escaseen en un tiempo en el que debería haber grandes cantidades”, señaló José Bornachera, vendedor de pescado.
Santa Marta Al Día se dio a la tarea de madrugar para conocer de primera mano cuales han sido los incrementos que sufrieron estos productos para esta Semana Mayor.
Finalmente, la comunidad de pescadores de Taganga invita a los samarios y visitantes a seguir adquiriendo sus productor y que no los abandonen en épocas tan difíciles como las que están viviendo en desde hace algunos meses.