Miles de jóvenes del Magdalena fortalecieron el Poder Popular a través de la cultura, el deporte y la participación comunitaria, demostrando que la organización juvenil puede transformar los territorios con liderazgo y oportunidades reales.
La juventud del Magdalena se convirtió en la protagonista del fortalecimiento del Poder Popular, demostrando que la participación organizada puede transformar el territorio a través de la cultura, el deporte y el liderazgo comunitario. Durante tres días, miles de jóvenes se tomaron los municipios del departamento con actividades que promovieron el talento, la identidad territorial y el trabajo colectivo.
La Semana de la Juventud se vivió en Puebloviejo, Tenerife, Concordia, Zona Bananera, Sitionuevo, Ariguaní, Aracataca, Pijiño del Carmen, El Banco, San Zenón y San Sebastián de Buenavista, convirtiendo estos territorios en escenarios de integración y creatividad.
Este evento hizo parte de la estrategia “Tejiendo Juventud, Construyendo Poder Popular”, impulsada por los Gobiernos Populares, quienes habilitaron espacios reales para que los jóvenes pudieran formarse, competir y liderar.
Aquí la juventud no es decoración, es transformación
“Mientras otros gobiernos reducen la participación juvenil a discursos o eventos decorativos, en el Magdalena se construye Poder Popular desde abajo y con sentido de territorio. La Semana de la Juventud no es una fecha en el calendario, es la demostración de que cuando hay voluntad política y organización comunitaria, la transformación empieza a sentirse desde los territorios”, afirmó Rafael Rebolledo, secretario de Equidad y Poder Popular.
Los jóvenes demostraron su creatividad en los ejes de Arte y Cultura, donde participaron en: maratón creativa (artes visuales y plásticas), bailes tradicionales, cultura Viva y mente ágil (conocimiento, ingenio y retos culturales).

Liderazgo y expresión ciudadana
El Parlamento de Juventud, las competencias de Oratoria y Discursos, y los espacios de debate fortalecieron la voz de los jóvenes como actores políticos y sociales dentro de sus comunidades.
Las actividades deportivas incluyeron: Fútbol, Juegos tradicionales, Carreras de sacos y Trompos. Los mejores participantes avanzarán a las clasificatorias subregionales (norte, centro, sur y río), donde representarán a sus municipios en la siguiente fase.
Lo que ocurrió en el Magdalena demuestra que cuando se brindan oportunidades reales, la juventud no solo participa: lidera, crea y transforma.
