Más de 110 mil visitantes, cero homicidios, y un notable impacto positivo en seguridad, economía, turismo y cultura marcaron la Semana Mayor en la ciudad.
Santa Marta cerró con balance positivo la Semana Santa 2025, gracias a un trabajo articulado entre las diferentes dependencias distritales, lideradas por el alcalde Carlos Pinedo Cuello, en coordinación con autoridades del orden nacional. La ciudad no solo garantizó la seguridad y el orden público, sino que también experimentó una importante reactivación económica y turística, convirtiéndose en uno de los destinos más destacados del país durante esta temporada.
Una de las cifras más destacadas fue la relacionada con la seguridad: no se reportaron homicidios durante la Semana Mayor. Esta notable reducción de los hechos violentos se logró mediante la implementación de la campaña ‘La Ciudad del Origen Más Segura’, que desplegó controles y operativos en sectores estratégicos como la Troncal del Caribe, el Parque Tayrona, Minca, Bonda, Taganga, el aeropuerto y la Terminal de Transportes. La presencia institucional en playas como Bello Horizonte y el Centro Histórico, junto al acompañamiento de la Policía Metropolitana y otras entidades, reforzó la percepción de tranquilidad entre residentes y turistas.

En materia de movilidad, las autoridades reportaron el ingreso de casi seis mil vehículos, aplicaron más de 400 comparendos y atendieron dos accidentes con saldo de lesionados. Los operativos garantizados permitieron una circulación fluida en sectores de alto flujo como El Rodadero, Minca y el Centro Histórico.
Desde el frente turístico, Santa Marta registró una ocupación hotelera del 78 % en días festivos, con más de 109 mil visitantes. Según datos del INDETUR y el Observatorio de Estudios Económicos, llegaron más de 64.000 pasajeros por vía terrestre y 45.000 por vía aérea. Para atender esta demanda, se desplegó un equipo de 1.500 funcionarios, junto a salvavidas y personal médico en puntos de alta afluencia.
La gestión de residuos también fue prioritaria. Se recogieron más de mil toneladas adicionales de basura, lo que representó un aumento del 30 % en comparación con los días normales. La limpieza se reforzó en zonas rurales y turísticas, además de campañas de concientización ambiental entre residentes y visitantes.
El componente social tampoco fue descuidado. Habitantes de calle fueron intervenidos en distintos puntos, logrando incluso casos de reunificación familiar y el ingreso de personas a centros especializados. Además, se atendieron niños y adolescentes en condición de vulnerabilidad.
La economía local también recibió un impulso importante con la realización de ferias comerciales que beneficiaron a más de 90 emprendedores, incluyendo a 36 mujeres en la tradicional Feria del Dulce, quienes generaron ventas superiores a los 32 millones de pesos. Estas actividades reflejan la apuesta del Distrito por el empoderamiento femenino y el fortalecimiento del tejido empresarial local.

El componente cultural también estuvo presente con actividades como cine al aire libre en Taganga, muestras artísticas en la Terminal de Transportes y otros eventos que promovieron el arte y la recreación como herramienta para la convivencia.
Incluso durante el receso escolar, la Secretaría de Educación mantuvo jornadas con docentes para fortalecer los proyectos pedagógicos, reafirmando que el desarrollo educativo no se detiene.
Con este balance, Santa Marta demostró que la coordinación efectiva entre gobierno, autoridades y comunidad puede traducirse en resultados concretos que impactan positivamente la calidad de vida y consolidan a la ciudad como un destino turístico responsable, seguro y próspero.
