Con recursos y mano de obra propia,ganaderos han decidido unirse para prevenir que el agua entre a las fincas aledañas al ferry.
La emergencia por la erosión del río Magdalena sigue latente en el municipio de Salamina, en donde los habitantes han decidido unirse con recursos y mano de obra propia para evitar que el agua del afluente inunde las fincas aledañas al ferry.
En fotografías enviadas por la comunidad a Santa Marta Al Día se ve como los salamineros han construido durante los últimos días un espolón artesanal en los puntos críticos del río.
Con troncos resistentes y sacos de arenas en la orilla del río buscan facilitar el paso de las máquinas y de los vehículos.
Además de contener la corriente del agua, que en medio de la temporada de lluvias aumentó su velocidad y fuerza, amenazando con llevarse todo a su paso.
Esta situación preocupa a los ganaderos que temen que con el pasar de los días el río arrase con el terreno, cultivo y animales de las fincas cercanas al ferry de Salamina.
Asimismo, los cinco propietarios que se encontraban en la zona ferry, quienes fueron evacuados por las autoridades por el peligro que significaba estuvieran en la sector, aseguraron a este medio periodístico, que hasta la fecha no se les ha notificado cuál será el futuro de ellos y sus establecimientos.
Les puede interesar