Habitantes de los municipios de la subregión río temen que el afluente se los ‘trague’ mientras duermen.
El miedo y la zozobra no cesan en Salamina; el río Magdalena amenaza con aumentar sus niveles y los habitantes del municipio temen acostarse a dormir y que el afluente arrase con sus viviendas.
Desde que se presentó el proceso erosivo hace algunos años los salamineros duermen con un ojo abierto y otro cerrado, ante la tragedia que podría generarse si el río Magdalena aumenta sus niveles.
“El temor es que el río vuelva a aumentar sus niveles y nos deje totalmente inundado al municipio de Salamina y municipios vecinos. El temor es bastante alto en la población y se suma a la situación difícil que estamos viviendo por la pandemia”, manifestó el Personero de Salamina, Carlos Mario de la Cruz.
Los municipios de la subregión río del departamento vienen afrontando una situación delicada por el fenómeno erosivo que se presenta a la orilla del afluente, sumándole, las dificultades para movilizarse de un municipio a otro por la falta de una vía en buen estado.
La vía más critica en estos momentos es la que comunica a Salamina con el municipio de El Piñón, donde se habilitó un tramo provisional para conectarlos, pero este está causando molestias en la población y cuando llueve queda intransitable.
“El trazado provisional que se viene haciendo para comunicar a Salamina con los demás municipios de la subregión del río está en condiciones críticas. Cuando llueve es verdaderamente intransitable y ha habido problemas con moradores del sector que no estaban acostumbrados al tráfico pesado y hoy en día tienen que verlo justo en frente de sus viviendas”, manifestó el Personero de Salamina Carlos Mario de la Cruz.
Asimismo, aseguró que como la carretera es destapada genera que se levante polvo y los vehículos que transitan por el lugar generan mucho ruido.
Ante la complejidad del problema y la falta de soluciones definitivas el Personero de Salamina, Carlos Mario de la Cruz, se pronunció haciéndole un llamado a las autoridades.
“El llamado es a que la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y Cormagdalena tomen medidas urgentes, y acciones inmediatas para resolver todos los inconvenientes que tenemos y podamos sacar de la emergencia a toda la comunidad”, aseveró De la Cruz.
El personero aceptó que se han venido presentando unas inversiones, pero que se están haciendo de forma aislada en cada punto crítico y no de manera integral.
Plan maestro
Por el momento, Cormagdalena asumió la coordinación de la elaboración de un Plan Maestro que identificará e implementará las acciones requeridas para solucionar la problemática generada en la vía que comunica los municipios de Salamina y El Piñón, por el proceso erosivo del río Magdalena sobre la margen derecha.
Este plan contemplará los resultados del estudio técnico que ha venido realizando la Sociedad Colombiana de Ingenieros, entidad convocada por el Gobierno Nacional para identificar las soluciones de largo alcance que ofrezcan tranquilidad a los habitantes de estos municipios a la ribera del río.
Se espera que con la creación y puesta en marcha de un nuevo proyecto este proceso erosivo se detenga y no arrase con estas comunidades.