Durante un evento recreativo, liderado por la Dragoneante Mónica Ternera, las internas de Santa Marta vivieron un emotivo reencuentro con sus pequeños.
Con el propósito de premiar el buen comportamiento de las mujeres recluidas en los patios de la cárcel Rodrigo de Bastidas durante la pandemia, la Dragoneante del INPEC, Mónica Ternera y todo su equipo de trabajo, decidieron brindarles un espacio de felicidad, amor y unión a los hijos de las internas.
En un lugar lleno de colores, inflables y muchos regalos, los pequeños se divirtieron rodeados de música y muchos juegos recreativos, de los que disfrutaron de principio a fin.
Durante la realización del evento, la Dragoneante Mónica, en compañía de la psicóloga Saray, decidieron sorprender a los niños y a sus madres, permitiéndoles reencontrarse a través de video llamada, luego de dos años sin poder verse a causa de la pandemia del Covid-19.
Además, cada una de las internas, plasmó un sentido mensaje en una carta, las cuales fueron entregadas a sus hijos; momento que llenaría de muchas emociones a los allí presentes, puesto que los niños no contuvieron las lágrimas al recibir el detalle hecho por sus madres.
Serán un total de 130 regalos entregados a los hijos de las reclusas, pero, al evento solo pudieron asistir 30 pequeños, debido a que muchas de las internas son de otras ciudades como Barranquilla, Valledupar, Ciénaga, entre otras partes de la región.
Por último, todos los regalos dados a los pequeños, fueron gestionados por la Dragoneante Mónica Ternera, con el apoyo del área de tratamiento y desarrollo del centro carcelario, quienes acudieron a personas de buen corazón, que decidieron unirse a esta bonita iniciativa, en pro de regalarles un momento diferente a las internas y sus familiares, durante la época más bonita del año.
