El asombro episodio ocurrió en Taiwán, cuando una joven de 20 años estaba arrancando malezas en una tumba de un familiar y los insectos se le metieron en su córnea.
La mujer identificada como He, narró que “Estábamos visitando y ordenando la tumba de un familiar cuando sentí un viento soplando en mi cara; pensé que era arena o tierra. Me limpie el ojo con agua, pero comenzó a dolerme mucho por la noche, un dolor agudo, y estaba llorando”.
Debido a los fuertes dolores He fue trasladada hasta el hospital universitario de Fooyin en Pingtung, en el sur del país asiático. Donde los médicos en turno hallaron a las abejas que se alimentaban bajo sus párpados hinchados.
Según un medio de comunicación británico el doctor Hung Chi-ting, jefe de oftalmología del hospital, comentó en una rueda de prensa que el caso de la joven He es único en el mundo.
“Vi algo que parecía ser patas de insecto, así que las saqué bajo un microscopio de una en una sin dañar sus cuerpos”, contó Hung.
Para finalizar el médico manifestó que la joven sufrió una una infección bacteriana en la piel y la inflamación de la córnea, ya que las abejas comieron de su ojo durante varias horas.