Las cirugías de este tipo habían sido suspendidas durante el periodo de la intervención de la Supersalud.
Tal y como se había anunciado hace algunas semanas, el Hospital Universitario Julio Méndez Barreneche, retomó después de tres años las intervenciones quirúrgicas a corazón abierto por una aparente. La entidad de salud informó que la cirugía fue un éxito.
“Durante este martes se realizó la primera operación de este tipo, a un paciente masculino de 67 años, afiliado a la EAPB MutualSer, cuyo proceso acabó con éxito”, indició la entidad de salud.
El Julio Méndez es un testimonio de transformación que se evidencia también en la ampliación del portafolio de servicios y calidad en la atención, que han significado el reinicio de las cirugías cardíacas, luego de que, a finales del 2022, se suspendieran estos procedimientos tan importantes para salvaguardar la vida de muchos pacientes.
“Con las orientaciones que dio Carlos Caicedo al recuperarlo para su modernización y al seguir este proceso con el doctor Rafael Martínez, hemos podido avanzar en mejorar toda la atención a los pacientes en el Departamento”, indicó Karin Machacón, gerente administrativa y financiera de Cardio Vida Santa Marta.
El cirujano cardiovascular Renato Ortiz, que estuvo al frente del procedimiento clínico, destacó que la reactivación del servicio es clave para seguir salvando vidas y mejorar las condiciones de salud de los pacientes en el Caribe.
“Es importante porque la patología cardiovascular, la enfermedad coronaria, es la principal causa de muerte a nivel mundial, por eso nos alegra mucho reactivar este servicio, porque estamos brindándole a los magdalenenses y a toda la población del Caribe una atención sin que se tengan que trasladar a otras ciudades”, dijo el galeno.
La cirugía a corazón abierto es uno de los procedimientos de mayor complejidad que se realiza en el HUJMB, con una duración entre 5 y 6 horas.
Recuperación financiera
EL Hospital Universitario Julio Méndez Barreneche (HUJMB), en manos de un modelo de Gobierno progresista, ha aumentado su capacidad pasando de un 66% a un 88% en la ocupación hospitalaria. En la recuperación de cartera con las EPS se logró conciliar $16 mil millones, y un reconocimiento de $10.130 millones de Comparta en Liquidación, lo que ha permitido el pago de viejas deudas y lograr inversiones en infraestructura, como las que se hicieron en el piso siete, Hospital Día (psiquiatría), impermeabilización y, además, la compra de equipos biomédicos.
Con el plan de recuperación se han pagado más de $8 mil millones en sentencias ejecutoriadas, pagos que se dejaron de hacer durante los años de intervención, lo que posibilitó un ahorro de más de $1.400 millones en las conciliaciones.
Además, los pasivos corrientes tuvieron una disminución de un 16,45%, lo cual impulsa a este conjunto de inversiones, dejando en el pasado aquellas prácticas que convirtieron a esta entidad en la caja menor de la clase política del departamento, la misma que gobernó hasta el 2019. Los recursos que antes eran apropiados por una pequeña élite, hoy están al servicio de los más pobres, de la calidad y de todos los que usan el sistema de salud.