El cierre de seis establecimientos comerciales y la suspensión de actividades a otros tres, fue el resultado de la ‘Caravana de Seguridad’ que las autoridades administrativas y policivas efectuaron anoche en el Centro Histórico de Santa Marta.
Los establecimientos fueron sellados por falta de documentación como lo indica la norma ley 1801 de 2016 del Código de Policía.
En este mismo operativo interinstitucional, el Departamento Administrativo Distrital de Sostenibilidad Ambiental, -Dadsa- realizó suspensión de actividades a 3 establecimientos y decomisó 7 parlantes.
Asimismo, la Policía Nacional hizo verificación de antecedentes a 75 personas y la Armada Nacional hizo inspección a locales comerciales, a personas con binomio canino en más de 20 establecimientos del Centro.
Migración Colombia atendió 45 ciudadanos extranjeros; la Secretaría de Promoción Social, Inclusión y Equidad, también se realizó una caracterización, socialización y acuerdo con 5 habitantes de calle colombianos y 10 venezolanos para la restitución del derecho de identificación debido a que están sin documentos, además de una sensibilización a los padres de 7 niños venezolanos.
“Nos vamos a concentrar en el Centro Histórico para hacer una buena intervención como lo está pidiendo la comunidad, cumpliremos el compromiso que hicieron nuestro alcalde Martínez y el coronel Berdugo. Vamos a recuperar el tiempo perdido, porque aquí no puede haber espacio ni para los bandidos ni para la delincuencia”, expresó Sarita Vives, secretaria de Seguridad encargada.
La intervención del Centro Histórico, tuvo la participación de la Policía Metropolitana con todas sus unidades, la Armada Nacional, Migración Colombia, Personería, Secretaría de Seguridad, Secretaría de Salud, Secretaría de Planeación, Departamento Administrativo Distrital para la Sostenibilidad Ambiental y la Secretaría de Promoción Social, inclusión y Equidad.
“Contamos con toda la oferta institucional del Distrito, la Policía Nacional, temas tratados como invasión del espacio público, en salud que tiene que ver con las comidas, la manutención alimentaria, infractores como consumidores de estupefacientes y otras circunstancias que seguirán siendo atendidas”, comentó el teniente coronel Jaime Villamil, comandante operativo de la Policía Metropolitana.