En la edición 2004 se midieron en esta misma instancia con un triunfo para la escuadra xeneize.
El superclásico Boca Juniors-River Plate, los históricos archienemigos argentinos, volverá a tomarse la Copa Libertadores cuando se crucen en las semifinales, un nuevo capítulo de su enconada rivalidad que tuvo como punto máximo a la final de la edición 2018.
Aún fresco en la memoria de ambas hinchadas está el 3-1 con el que los de la banda roja cruzada se impusieron sobre los xeneizes en el estadio Santiago Bernabéu, en una final de vuelta que la Conmebol trasladó a Madrid tras los actos de violencia que protagonizaron fanáticos de River contra el autobús de Boca, cuando se acercaba el plantel al estadio Monumental para ese compromiso.
La ida en La Bombonera se había saldado con un empate 2-2 sin incidentes dentro y fuera del estadio.
Ahora el nuevo cara a cara será en las semifinales, a la que River llegó al empatar 1-1 este jueves con Cerro Porteño en Asunción.
El veterano delantero Nelson Haedo Valdez adelantó al Ciclón guaraní a los 8 minutos, pero el uruguayo Nicolás De La Cruz se encargó a los 52 del gol ‘millonario’ y darle el pase al campeón defensor a las semifinales.
En la ida en Buenos Aires, River se había impuesto por 2-0.
Como aperitivo a los dos explosivos choques de semifinales, River será anfitrión este domingo de Boca por la quinta fecha de la Superliga argentina de primera división.
La otra semifinal del torneo la protagonizarán Gremio y Flamengo, por lo que la final de la Copa será nuevamente entre clubes argentino y brasileño.
Las semifinales están pautadas para el 2 y 3 (ida) y 23 y 24 (vuelta) de octubre, según el programa de competición de la Conmebol.
La final de la Copa Libertadores 2019 por primera vez se jugará en partido único, el 23 de noviembre en sede designada que recayó en el Estadio Nacional de Santiago.