Desde que se inició una lucha interna por el control de este hotel ubicado en el Tayrona, sus socios han denunciado secuestros, amenazas y ahora una presunta toma violenta.
Hablar del hotel Ecohabs Bamboo ubicado en el Parque Nacional Natural Tayrona ya no es resaltar su comodidad y elegancia en medio de la naturaleza, sino, es hablar de una pugna interna entre socios que ya toma una alta relevancia por denuncias de secuestros, amenazas y tomas violentas.
La más reciente denuncia la dio a conocer a través de un comunicado, el empresario y abogado, Augusto César Rico García, quien manifiesta que el hotel ecológico que construyó y operó durante más de cinco años en la entrada del fue presuntamente tomado por la fuerza por su socio minoritario, al parecer respaldado de estructuras criminales.
Estaría siendo operado ilegalmente
Según César Rico García, el hotel Ecohabs Bamboo Tayrona, está siendo operado ilegalmente desde el pasado sábado 14 de junio, por personas distintas al equipo de empleados del hotel, bajo una nueva razón social que no cuenta con autorización ni registro de turismo para comercializar el establecimiento.
“Esta situación se agrava hoy, lunes 16 de junio, día en que el Parque Nacional Natural Tayrona reabre sus puertas al público tras su cierre anual del 1 al 15 de junio. Turistas extranjeros con reservas confirmadas desde hace meses a nombre de Bamboo Tayrona llegarán al hotel sin saber que se encuentra en manos de personas diferentes, en una situación que podría constituir un fraude y poner en riesgo su integridad”, manifiesta el abogado en su comunicado.
Una novela de varios capítulos
Y es que el nombre del Ecohabs Bamboo se dio a conocer en el mes de abril a nivel nacional, no por sus servicios, sino, por el presunto secuestro del que fueron víctimas varios de sus trabajadores; desde allí comenzó un cruce de versiones y señalamientos por parte de los socios.
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Según la denuncia pública de Rico García, el conflicto inició en febrero de 2025, cuando fue contactado por su socio minoritario, el señor Robinson Jesús Méndez Mendoza, quien lo presentó con un presunto jefe paramilitar.
“A partir de ese momento comenzaron amenazas sistemáticas. En abril, el abogado y cinco empleados fueron retenidos en contra de su voluntad, presionados y obligados a firmar documentos bajo coacción. La denuncia del secuestro fue radicada en la Fiscalía y acompañada de audios, testimonios y evidencias, sin que hasta la fecha se haya producido ninguna captura”, dice uno de los apartes del comunicado.
Augusto Rico, quien posee el 70 % de la sociedad, también denuncia que su familia se encuentra en situación de riesgo, al igual que los empleados que estuvieron secuestrados con él, por lo que pide la intervención de las autoridades.
