El folclor está de luto. En la noche de este viernes 14 de febrero falleció Catalino Parra, el último fundador vivo de los Gaiteros de San Jacinto.
El compositor y cantante estuvo hace unos días hospitalizado en Cartagena y hoy la muerte le visitó estando en la casa de una de sus hijas en el barrio San Fernando.
Parra, quien nació en Soplaviento el 25 de noviembre de 1925, perteneció a la primera generación de los Gaiteros de San Jacinto, junto a Toño Fernández, Juan “chuchita” Fernández y José Lara.
Con su música de gaitas y tambores, que estremecía desde el más pobre hasta el más rico, le dio la vuelta al mundo.
Los animales y sus hábitos, los conflictos de estos con el hombre, la vegetación silvestre, la siembra y la pesca, las congojas del campesino, los amores ariscos, fueron los motivos de sus canciones.
Algunas de ellas son: Manuelito Barrios, El morrocoyo, Josefa Matías, Donde canta la paloma, La vaina ya se formó, Animalito del monte y La concepción.
Más de Catalino
Cato fue profesor de música e invitado especial por diversas universidades que buscaban rescatar las expresiones folclóricas de la Costa Caribe. También fue instructor musical y por supuesto constructor de instrumentos. Trabajó en Cartagena en el Colegio Mayor, el Colegio Nocturno Rafael Núñez, el Colegio de la Casa de la Cultura y con el Equipo Misionero de la Bahía, enseñando percusión y danza.
Su esposa Tita Isabel Parra Vega (Q.E.P.D.) fue el amor de su vida. Una compañera cuyo deceso en 2010 le costó a Catalino una crisis arterial y por poco una profunda depresión.
El juglar ganó el Premio Vida y Obra del Ministerio de Cultura en 2004.