El Distanciamiento social de dos metros solo se vio en los letreros de los restaurantes.
Las imágenes evidenciadas por SANTA MARTA AL DÍA este fin de semana en el Centro Histórico de Santa Marta deja al descubierto la falta de preocupación de turistas y samarios por el covid-19.
Asimismo la falta de medidas y controles de las autoridades para evitar aglomeraciones y hacer valer los protocolos de bioseguridad dentro y fuera de los restaurantes.
Las calles este fin de semana del Centro se volvieron intransitables y era imposible no rozar o entrar en contacto permanente con personas que caminaban por este sector, ya que las sillas y mesas de los restaurantes se encontraban en medio de la calle reduciendo el camino del peatón.
Es claro que la reapertura económica va por buen camino si se ve desde el punto de vista de los restaurantes, los cuales están autorizados para ofrecer sus productos gastronómicos, pero en el recorrido se reflejó también la venta de licor en estos sitios.
Cabe recordar que los lugares especializados para vender bebidas alcohólicas, como bares y discotecas permanecen cerrados desde el inicio de la pandemia, muchos de estos locales han quebrado por la falta de ingresos.
El pasado martes 10 de noviembre los dueños de estos establecimientos protestaron frente a la Alcaldía, afirmando que no hay ninguna diferencia en que un restaurante venda licores y ellos tengan que mantener cerrados pese a que el licor es su principal productor.
“Vemos con preocupación que otros sectores de la economía están vendiendo licor y no pasa nada, en cambio nosotros que pagamos nuestros impuestos y somos los que estamos autorizados para vender bebidas alcohólicas no podemos”, expresó Vanesa Alvarado.
Se espera que las autoridades tomen cartas en el asunto y estudien el aforo de personas que debe ingresar al Centro Histórico, igualmente que se realicen controles permanentes es los restaurantes para que se eviten estas aglomeraciones que sin duda alguna prenden las alarmas en la capital de Magdalena.