El pegador ruso Maxim Dadashev murió como resultado de las lesiones cerebrales sufridas en una derrota por nocaut en el undécimo asalto ante Subriel Matias el viernes por la noche en el MGM National Harbor en Oxon Hill, Maryland.
Donatas Janusevicius, entrenador de fuerza y acondicionamiento de Dadashev, que había estado con él en el Centro Hospitalario Prince George’s de la UM desde Cheverly, Maryland, desde que fue trasladado allí después de la pelea, y el entrenador Buddy McGirt confirmaron su muerte.
“Solo te hace darte cuenta de en qué tipo de deporte estamos, hombre”, le dijo McGirt a ESPN. “Hizo todo bien en el entrenamiento, sin problemas, sin nada. Mi mente está como realmente loca, ahora mismo. ¿Qué podría haber hecho diferente? Pero al final del día, todo estaba bien (en entrenamiento).
“Parecía estar bien, estaba listo, pero es el deporte en el que estamos. Solo toma un golpe, hombre”.
Dadashev se enfrentó a Matías (14-0, 14 KOs) de Puerto Rico, en una pelea eliminatoria del título mundial de 140 libras por el derecho a convertirse en el retador obligatorio para el cinturón de Josh Taylor.
Después del undécimo asalto cuando McGirt detuvo la pelea con Dadashev en el banquillo en una escena dramática.
Después del asalto, McGirt le dijo a Dadashev en voz alta: “Voy a detenerla, Max. Max, te están golpeando demasiado”.
Dadashev negó con la cabeza para indicar que no quería que la pelea se detuviera, pero McGirt continuó: “Por favor, Max, por favor. Déjame hacer esto. ¿De acuerdo? De acuerdo? Mírame. Por favor”.
Dadashev volvió a negarse con la cabeza y McGirt dijo: “Si no lo hago, el árbitro lo hará. Vamos, Max. Por favor.”
McGirt no esperó otra señal de Dadashev. “Eso es todo, doctor”, le dijo al médico en ringside. Luego se dirigió al árbitro Kenny Chevalier: “Eso es todo”.
McGirt dijo que primero pensó en tirar la toalla en el noveno asalto, pero sabía que tenía que detenerla después del 11º.
“Lo vi desvanecerse y cuando regresó a la esquina (después del 11° asalto), mi mente ya estaba decidida”, dijo McGirt. “Solo le pedía por respeto, pero mi mente ya estaba decidida. No iba a dejar que saliera.
Dadashev (13-1, 11 KOs), casado y padre de un hijo, que era de San Petersburgo, Rusia y tenía su base en Oxnard, California, necesitó ayuda para abandonar el ring.
Se desplomó antes de llegar al vestidor y comenzó a vomitar. Fue sacado de la arena en una camilla y luego fue trasladado en ambulancia al hospital, donde fue sometido a una cirugía cerebral de emergencia durante dos horas por un hematoma subdural: sangrado en el cerebro.
Los médicos esperaban aliviar la presión en el lado derecho de su cerebro, donde estaba la mayor parte del daño, con la cirugía y lo colocaron en un coma inducido médicamente, para permitir que la inflamación del cerebro disminuyera.
