Entre las acciones contempladas está el cierre de la playa una vez al mes, horas de silencios nocturnos y el control migratorio de vendedores ambulantes.
Como parte de una estrategia integral, el Distrito a través de sus dependencias lanzó un plan de choque que busca la recuperación turística del balneario El Rodadero, el cual se ha visto afectado por la cada vez creciente migración de venezolanos.
La alcaldesa Virna Johnson fue enfática al indicar que el trabajo es urgente por tanto que el incremento de fenómenos como la inseguridad, la informalidad de vendedores y la apropiación del espacio público, ha afectado la percepción hacia este destino turístico.
“El plan busca que en El Rodadero florezca, para que sea el lugar apetecido por el turismo nacional y extranjero”, explicó la mandataria al inicio de la socialización de las medidas, las cuales entran en vigencia a partir de hoy.
Jhonson delegó estratégicamente algunas funciones a Secretarios y Directores de despacho para que de forma constante realicen los operativos correspondientes e impongan las sanciones que vengan al caso.
ALGUNAS ACCIONES EN EL MARCO DEL PLAN DE CHOQUE
La Secretaría de Gobierno, en cabeza de Adolfo Bula, tendrá la misión de liderar las acciones de la Unidad Defensora del Espacio Público (UDEP) que empezará su tarea este 2020 con 24 unidades específicas para El Rodadero.
“Las playas se cerrarán a las 6 pm y las zonas de transición a las 8pm. Una vez al mes se cerrará la playa para la oxigenación. Habrá una taquilla única para la compra de tiquetes turísticos. Se instalarán cámaras y alarmas de suguridad. Se ejercerá control sobre los precios de los productos para evitar los abusos”, agregó la mandataria de los samarios como acciones complementarias de Bula.
Por su parte, la secretaria de Seguridad, Sandra Vallejos, recibió la directriz de insistir en la prevención, disuaciación del delito, y el control de la zona, por lo que la alcaldesa le insistió que “tiene que haber presencia constante de la Policía para que se cumplan las disposiciones, especialmente el decreto de cierre de playas”. Vallejos deberá continuar con las caravanas de la seguridad y las labores de registro y control.
“Todos extranjero que infrinja le Ley debe salir de la ciudad. Esta es una manera mantener el control”, fue la máxima de Johnson Salcedo al insistir en el tema de la seguridad, donde solicitó el acompañamiento de Migración Colombia.
Los 24 gremios del sector coincidieron que la constancia de las autoridades es determinante para lograr los objetivos planteados en este organigrama. Los carperos le pidieron al gobierno que volvieran los cursos de inglés y de atención al cliente, así como también ponerle mucha atención a la mendicidad de niños venezolanos en las zonas de transición.
De esta manera se materializó la estrategia que fue estructurada en 6 reuniones con los distintos actores del turismo local.