Indican que Enrique Vives nunca ha mostrado arrepentimiento, ni les ha pedido perdón por haberle arrebatado a sus seres queridos.
La familia de María Camila Martínez, una de las víctimas de la tragedia en Gaira, indica que no se sienten a gusto con el ofrecimiento realizado por la Fiscalía a Enrique Vives, en donde solo pagará 7 año y medio de prisión domiciliaria.
La vocera de la familia, indicó en exclusiva para Santa Marta Al Día que aún hay muchas dudas de lo que sucedió aquél fatídico 13 de septiembre del 2021, en el que murieron 6 jóvenes.
“Nosotros buscamos justicia, la verdad. El señor Vives se declara culpable ahora porque en estos momentos es que le sirve, pero ha estado siempre en su casa relajado sin ningún remordimiento”, indicó Gloria González, suegra de la fallecida.
Según manifiestan Vives en ningún momento ha mostrado intenciones de un acercamiento con las víctimas y mucho menos adelantar un acto de perdón.
“En ningún momento la familia de él, ni él siquiera a pesar de que en esos días su esposa dio a luz, ni eso le remordió la conciencia al menos de pedir un espacio y decir perdón”, agregó.
Pese al profundo dolor que aún viven, indican que la situación hubiese sido más llevadera si el empresario hubiese tomado una actitud diferente desde el principio.
“Si él hubiera hecho de pronto al principio mostrar remordimiento, el dolor no hubiera sido tan duro, porque todos cometemos errores”, acotó la mujer.
Finalmente, la familiar, manifiesta que su única intención es la de que haya justicia, se conozca la verdad y que el empresario samario muestre arrepentimiento con lo que ocasionó.
“Yo si lo perdono, porque el único que tiene derecho a juzgar es Dios”, puntualizó.
