En los últimos 7 años se ha venido hablando de “el cambio” en Santa Marta a través de las administraciones de Carlos Caicedo y Rafael Martínez y cómo estos habrían desistido de las prácticas de la política tradicional.
Sin embargo, los nombres de Martínez y Caicedo, no son tan lejanas a las familias que por tradición han ocupado cargos públicos tanto en Santa Marta como en el Departamento.
Caicedo tal y como expresó a través de unos trinos el ex alcalde Juan Pablo Díazgranados, ha sido acompañado y acompañante de procesos políticos de la clase tradicional en el Magdalena.
Carlos Caicedo que hoy pregona “luchar” contra la clase política tradicional, empezó su carrera hace algunos años como secretario general del gobernador Jorge Caballero, entre 1995 y 997; posteriormente fue designado como rector de la Universidad del Magdalena, por el mismo gobernante; además del apoyo irrestricto de la familia Vives Lacouture y del ex alcalde Alfonso Vives Campo a su campaña en 2011.
Por otro lado el asegurado alcalde Rafael Martínez, fue colaborador de Caicedo en la Universidad del Magdalena, además de brillar en la campaña política para la Alcaldía, por adelantar fórmula a la Gobernación con Joaquín José Vives Pérez, el primo de la actual mandataria Rosa Cotes y sobrino de José Ignacio ‘Nacho’ Vives.
Pero no sólo Carlos Caicedo ha sido escudero de campañas políticas de la clase tradicional, su hermana, Patricia, tristemente célebre por su apoyo a la campaña de la Farc en las pasadas elecciones a congreso; también fue acompañante del hoy director de Corpamag y ex candidato a la Alcaldía, Carlos Francisco Díazgranados y que para esos días apoyaba al congresista José Pinedo en su aspiración a la Gobernación del Magdalena.
La duda que deja el recorrido político y los apoyos recibidos por las familias tradicionales es: ¿A cuáles de antes se refieren?