El togado consideró que ya cumplió las 3/5 partes de su pena. Le puso un periodo de prueba de 36 meses.
Cinco años después de haber sido condenado, el juez 22 penal del circuito de Bogotá le otorgó la libertad al hacker Andrés Fernando Sepúlveda, quien en el 2015 recibió una pena de 10 años de prisión.
Según el juzgado, Sepúlveda ya cumplió las 3/5 partes de su sentencia y por lo tanto puede recobrar la libertad. Así las cosas, en las próximas horas Sepúlveda dejará la cárcel La Picota, en donde ha estado detenido desde el 2014.
De acuerdo a lo informado por el diario El Tiempo, el juzgado revocó un auto del 12 de agosto de este año que le había negado la libertad condicional, y que había sido proferido por el juzgado 15 de ejecución de penas.
Al permitirle salir de prisión, el juez le dio un periodo de prueba de 36 meses y 18 días, que es el tiempo que le falta para cumplir su pena, y en los que deberá garantizar buen comportamiento.
En el 2015, Sepúlveda fue condenado por interceptar las comunicaciones de los negociadores del proceso de paz que se adelantaba en esa época entre el gobierno de Juan Manuel Santos y las Farc, en La Habana. La condena se dio por los delitos de concierto para delinquir, acceso abusivo informático, violación de datos personales agravado, espionaje y uso de software malicioso.
Esa condena se dio después de que Sepúlveda llegó a un preacuerdo con la Fiscalía para pagar ese número de años a cambio de entregar información sobre estos hechos, que se dieron en el 2014, en medio de la campaña presidencial del entonces candidato del Centro Democrático Óscar Iván Zuluaga en la que Sepúlveda había sido contratado.
Ese año, el 5 de mayo, Sepúlveda fue capturado señalado de ser el jefe de una oficina de interceptaciones ilegales que, según dijo la Fiscalía en ese momento, tenía como objetivo sabotear el proceso de paz.
Aunque Sepúlveda había buscado que su proceso fuera acogido en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), su solicitud de sometimiento fue rechazada en septiembre de este año por esa justicia, pues consideró que los hechos por los que él fue condenado no tuvieron una relación directa o indirecta con el conflicto armado.
