Buscan recoger 15.000 firmas, para realizar una petición formal a la administración distrital y ponerle fin al maltrato de los equinos.
Pese a que se estableció una medida para sustituir el uso de vehículos de tracción animal a nivel nacional, mediante la Ley 2138 del 4 de agosto de 2021, en Santa Marta esta practica sigue latente, razón por la que Nayibe Rojas, líder animalista estima recoger alrededor de 15.000 firmas para alcanzar esta petición en pro de aquellos que no tienen voz.
Actualmente en la capital del Magdalena circulan cerca de 297 vehículos de tracción animal atentando, principalmente contra la vida de los equinos, debido al tema de seguridad vial.
Las zonas donde más se sigue observado el maltrato de los equinos son, la Troncal del Caribe y Vía Alterna al Puerto de Santa Marta, las cuales son de gran flujo vehicular, en donde estos se han desplomado ante el deficiente estado de salud en que se encuentran, además de las altas temperaturas que se registran en la capital del Magdalena.
Ante la lamentable situación y la falta de acciones contundente por parte de las autoridades para impedir esta práctica, Nayibe Rojas tomó la iniciativa recolectar firmas para desaparecer estos vehículos, teniendo en cuenta que por decreto esto se encuentra prohibido.
“Esta práctica debería estar eliminada, pero el Distrito no ha acatado las leyes y el fallo judicial de la demanda de acción popular que gané, es por esto que hay que crear la causa ciudadana para que el Ministerio del Interior venga a la ciudad y exista un compromiso serio para realizar la sustitución y prohibir la circulación de los llamados carromulas”, afirmó la animalista.
Cabe anotar, que esta iniciativa, que tiene como fin velar por los derechos de los animales, busca llegar a un total de 15.000 firmas y al concluir con dicha meta, se hará una petición formal a la administración distrital para ponerle fin a esta práctica. Hasta el momento, la iniciativa supera las 10.877 firmas reunidas
´En los rincones olvidados de la ciudad de Santa Marta, se sigue tejiendo un relato desgarrador para los animales que claman por justicia y compasión. Imaginen, 297 almas inocentes, arrastrando cargas pesadas en carromulas y sus ojos reflejando una tristeza inconsolable. Es hora de alzar la voz en nombre de aquellos seres sintientes que no pueden hablar”, finalizó Rojas.