“El Gobierno planea recibir y utilizar entre 400 y 500 millones de dosis de vacunas de la COVID-19”, afirmó el ministro de Salud, Harsh Vardhan.
La India tendrá disponibles para el próximo mes de julio entre 400 y 500 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus para proteger a entre 200 y 250 millones de personas pertenecientes a sectores estratégicos en la lucha contra la pandemia, informó este domingo el Ministerio de Salud indio.
“El Gobierno planea recibir y utilizar entre 400 y 500 millones de dosis de vacunas de la COVID-19”, afirmó el ministro de Salud, Harsh Vardhan, en un evento virtual en el que habló con ciudadanos sobre los últimos avances relacionados con la pandemia.
Según el ministro, “el objetivo del Gobierno es cubrir a entre 200 y 250 millones de personas en julio de 2021”, cuando recibirán las vacunas, una cifra que se ve aún insuficiente para un país de 1.350 millones de habitantes.
Por ello Vardhan subrayó que la distribución de las vacunas se hará de manera centralizada, rigurosa y coordinada para evitar que algunas dosis sean revendidas en el mercado negro, con el objetivo de que lleguen a sectores estratégicos como el de los trabajadores de la salud o a los más vulnerables como los ancianos.
Este anuncio llega cuando el país se mantiene como el segundo con más casos de coronavirus, con 6,5 millones de casos, solo por detrás de Estados Unidos, y tras superar este fin de semana las 100.000 muertes por COVID-19.
El Ministerio de Salud insiste sin embargo en que la situación en la India está bajo control, con el número de casos activos descendiendo y manteniéndose por debajo del millón desde hace casi dos semanas, con 937.635 hoy, 7.371 menos que ayer.
Así en las últimas 24 horas se registraron 75.829 nuevos casos y 82.260 recuperaciones, mientras que se produjeron 940 nuevos decesos, con un total de 101.782 muertes desde el inicio de la pandemia.
QUINTA FASE DE DESESCALADA
El número de casos en la India, que sigue siendo alto a pesar de que la curva ha comenzado a descender ligeramente, no ha impedido que el Gobierno anunciara esta semana la entrada en vigor el 15 de octubre de la quinta fase de la desescalada.
Con esa nueva fase se autoriza la reapertura de las escuelas, aunque deja bajo la decisión de los gobiernos regionales la viabilidad de la implementación, y permite la reapertura de las salas de cine con un aforo restringido al 50 por ciento.
Algunas regiones indias se han apresurado sin embargo a anunciar que no permitirán aún la reapertura de las escuelas, como la propia Nueva Delhi, que anunció este domingo que por la seguridad de los niños los colegios permanecerán cerrados hasta el 31 de octubre.
Con la fase cinco la India habrá levantado casi todas sus restricciones, manteniendo medidas rigurosas solo dentro de las zonas definidas como áreas de contagios, en un intento por poner en marcha la actividad económica del país.
Las restricciones se mantienen también sobre los vuelos internacionales, excepto para los viajes de repatriación y las rutas a través de las burbujas o puentes aéreos.