Corrientes de aguas claras, ese es el significado del nombre de Ariguaní, el municipio que se ha vuelto noticia, porque hace 44 días un menor fue violado y asesinado y las autoridades parecen ser las únicas sin tener pistas de lo ocurrido.
“¿Nadie sabe nada?, más bien nadie dice nada”, aseguran vecinos del Barrio Arriba, sector popular que está muy cerca al barrio 20 de Mayo, lugar donde vivía Maicol y a donde después del trágico 23 de diciembre, nunca más llegó.
Los rumores crecen y en medio de la desesperación llaman la atención de las autoridades, sobre una verdad que parece no estar a la vista, pero está más clara que el agua del río Ariguaní.
Y es que en esa población ubicada en la subregión Centro del Magdalena, tierra de acordeones y de la leyenda del Tigre de la Montaña, la muerte del niño no tendría que ver con un violador en serie particular, ni un hecho dirigido por bandas criminales; sino lo muchos han llamado un crimen pasional en medio de una aberrante comunidad de violadores y abusadores sexuales.
Nadie se atreve a decir nombres, pero ha nacido en El Difícil el rumor que personas de la clase social más exclusiva del valle de Ariguaní, harían parte de esta corriente que, en medio de una fiesta en una finca, habrían solicitado la presencia de menores de edad, para adelantar practicas sexuales bajo los efectos de la droga y el alcohol.
¿POR QUÉ LA FISCALÍA NO INVESTIGA ESTAS VERSIONES?
Según vecinos de Ariguaní, desde hace más de un mes cuando el hecho sucedió, se ha notado una lentitud por parte del aparato judicial de adelantar investigaciones.
Desde el video de cámaras de seguridad donde se ve al menor saliendo en una motocicleta, el lugar donde fue encontrado, las versiones que indican del presunto círculo conformado por varios “hijos de papi y mami”, como dicen en el pueblo y otros tantos comentarios que van y vienen, parecen irse con el viento como las notas del son.
EL ALCALDE EN SANTA MARTA
David Farelo Daza, alcalde de Ariguaní estuvo en Santa Marta y pidió al gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo apoyo en la investigación, el mismo mandatario departamental, rechazó el hecho y aumentó la recompensa por información a $10 millones.
Caicedo aseguró que casos como el del menor Maicol, no se pueden presentar en el Magdalena; sin embargo, días después, la familia Martínez, sigue esperando respuestas.
EL HECHO
El 23 de diciembre en inmediaciones de la finca Canaima, fue encontrado el cuerpo sin vida del joven Maicol Martínez, que horas previas había sido reportado como desaparecido en El Difícil, oriente del Magdalena.
Al joven lo encontraron con una herida mortal, producto de puñal, en el corazón.