Según el afectado, le habría propinado un ‘cachazo’ en medio de un cruce de palabras por unas tierras.
Un lamentable hecho se presentó el pasado miércoles 27 de octubre, cuando Camilo Mario Dávila Villareal junto a un grupo de topógrafos se disponían a tomar el camino que conduce hacia la playa Inca Inca desde El Rodadero.
Según el relato del denunciante, en medio de las labores que realizaban fueron interceptados por Jose Rafael Abello Silva conocido con el alias del ‘Mono Abello’, un reconocido exnarcotraficante samario que pagó condena en los Estados Unidos.
De acuerdo con la denuncia en la Fiscalía, Abello Silva insultó a Dávila Villarreal porque se dirigían hacia estos predios con los topógrafos.
En medio de la acalorada discusión ‘El Mono Abello’ habría sacado un arma de fuego y posteriormente le propinó un ‘cachazo’ a la altura del ojo izquierdo, según el afectado.
“No conforme con el golpe que me dio, me amenaza con matarme diciéndome que, si en 24 horas no me iba de la ciudad, me iba a matar”, puntualizó Dávila en su denuncia.
Santa Marta Al Día contactó a Camilo Mario Dávila, quien expresó ser el representante legal de una empresa de razón social Inversiones Tayrona Gaira Ltda.
Además, Dávila manifestó que la empresa que representa es la propietaria legítima del terreno ubicado en Inca Inca y le fue arrebatada.
Dicha propiedad tiene una extensión aproximada de 50 hectáreas, de las cuales Abello habría invadido a través de amenazas presuntamente desde finales de los años 80.
Camilo Mario acotó que Abello en su momento habría utilizado a ‘terceros’ con el fin de crear documentos paralelos en la Oficina de Instrumentos Públicos, presuntamente con el fin de apropiarse del terreno.
“Si me llega a pasar algo a mi persona o algún miembro de mi familia, señaló directamente a José Rafael Abello Silva, como autor”, finalizó Dávila.
Cabe recordar que, José Abello fue capturado por narcotráfico y extraditado en el año 1987 a Estados Unidos donde purgó su pena hasta 2007.
Tiempo después fue deportado a Colombia donde permanece libre debido a la prescripción de sus ilícitos.