La comunidad denuncia que conseguir un vehículo de servicio público para esta época decembrina es imposible, la mayoría se niegan a ir a los destinos que los usuarios quieren llegar.
Una gran problemática se viene generado año tras año en la capital del Magdalena, los conductores de taxi, se niegan a prestar sus servicios a lugares un poco lejanos del sector donde se encuentre, con su famosa frase ‘para allá no voy’.
En la noche del lunes, en la carrera 5 con calle 22 se presentó uno de estos casos, una mujer de la tercera edad, en compañía de sus hijas y nietos, fueron bajados de un taxi, después que el conductor del vehículo se negara a prestar sus servicios hasta el destino que necesitaba llegar.
Un periodista de Santa Marta Al Día quiso conocer más afondo el caso, pero la afectada no quiso revelar su nombre y manifestó que no alcanzó a tomar la placa del vehículo, pero lo que si le molesto fue que la dejará en medio de la vía “porque según él no la podía llevar”.
El llamado es al Secretario de Movilidad para que controle el servicio público y sancione a los conductores que se nieguen a llevar a los usuarios a los lugares donde desean llegar.