Tres de los asaltantes fueron detenidos por la Policía Metropolitana de Santa Marta.
Un verdadero calvario vivió un joven quindiano, residente en Santa Marta, luego de ser secuestrado, goleado y robado, por una banda de delincuentes en la capital del Magdalena.
De acuerdo con la denuncia interpuesta por el afectado, que prefirió no revelar su identidad por seguridad, el hecho ocurrió el pasado sábado 3 de junio sobre las 11:45 de la noche.
“Vivo en el barrio Los Alcázares en compañía de una amiga y todas las noches salgo a ‘tanquear’ los vehículos en la bomba de gasolina Primax que se encuentra ubicada en el sector de Cootransmag”, dijo el denunciante.
En su relato, el joven indicó que, salió caminando de su domicilio y llegó hasta las afueras del centro comercial Ocean Mall, donde tomó una moto. En el recorrido, el conductor presuntamente lo amenazó con un arma blanca tipo cuchillo y lo llevó hasta el Cerro de las Tres Cruces.
“Cuando llegamos al lugar, estaban dos personas más, que me quitaron un celular, una pulsera de plata y me golpearon en varias partes del cuerpo con un arma de fuego. También me pidieron abrir mi cuenta bancaria para pasarles todo el dinero, sin embargo, les dije que estaba dispuesto a entregarles el dinero que guardaba en mi casa, si me dejaban libre”, agregó el afectado.
El denunciante continuó su relato, agregando que tras permanecer por varias horas en el lugar y con cien mil pesos en dinero en efectivo que ofrecer, los asaltantes decidieron trasladarse hasta el inmueble del joven para terminar su ‘fechoría’.
“Nos montamos en un taxi, llegamos a la casa y solo entramos un atracador y yo, le dije a mi amiga lo que me había sucedido, que por favor me prestara”, dijo el joven.
En el momento que el delincuente intentó escapar por primera vez, pasó un cuadrante de la Policía, por lo que esperó que los agentes se marcharan para salir de la casa.
“Nos asomamos por la ventana, para ver qué ruta cogía el ladrón y nos dimos cuenta de que varios agentes lo habían detenido junto a sus cómplices. De inmediato nos acercamos y le manifestamos a los uniformados lo que había sucedido”, puntualizó.
Finalmente, los individuos fueron sometidos a un registro corporal y metros más adelante, los agentes lograron encontrar el arma de fuego con la que, supuestamente, habían intimidado al joven.
Por tal motivo, fueron llevados hasta los calabozos de la URI de la Fiscalía General de la Nación, donde deberán responder por los delitos que son señalados.