Uno de estos casos se registró en la carrera 2 entre calles 7 y 8 de El Rodadero, donde un antiguo árbol de la especie Carito fue derribado por la brisa.
Con el propósito de proteger la integridad física de los habitantes de Santa Marta, el Departamento Administrativo Distrital de Sostenibilidad Ambiental -Dadsa-, dirigido por Patricia Caicedo, intensificó las acciones de intervención de árboles precipitados o a punto de venirse abajo por cuenta de los fuertes vientos que por esta época del año suelen correr en la región Caribe.
Para ello, la autoridad ambiental del Distrito, ha dispuesto varias brigadas en distintos sectores de la ciudad donde se han precipitado algunos árboles secos. Igualmente, ha adelantado labores de prevención en otros que amenazaban con caerse a causa de la brisa y el alto nivel de sequedad o deterioro que presentan.
Precisamente, uno de estos casos se registró en la carrera 2 entre calles 7 y 8 de El Rodadero, donde un antiguo árbol de la especie Carito fue derribado por la brisa y debido a que presentaba un tejido necrótico, cayendo sobre el techado de unos locales comerciales ubicados en la zona, ocasionando leves daños sobre su infraestructura.
En este sentido, desde el momento en que la entidad tuvo conocimiento de la problemática manifestada por la comunidad, sobre el riesgo de volcamiento del individuo arbóreo, se emprendió una serie de acciones oportunas para superar la emergencia, por lo cual el caso fue reportado a la Essmar y a la empresa A-ire, a las que también les competen realizar intervenciones al tratarse de ramas que entran en contacto con las redes eléctricas de alta tensión.
Posteriormente, A-ire procedió con la poda de las ramas pare evitar la afectación del fluido eléctrico y la Essmar se encargó del corte de las mismas de manera controlada, para disminuir el peso del árbol y minimizar el riesgo de volcamiento total.
Asimismo, cabe resaltar que el Dadsa es la entidad encargada de salvaguardar las especies forestales ubicadas en el perímetro urbano, sin embargo, en esta ocasión, debido a las condiciones del individuo forestal y con el objetivo de prevenir una afectación a la comunidad aledaña, la autoridad procederá -en caso de ser necesario- con la respectiva tala del árbol, y de esa forma, evitar la materialización del riesgo.
Otros sectores donde el Dadsa ha participado en actividades de intervención y prevención de árboles caídos son: el Parque acuático de El Rodadero; la carrera 26 con calle 17 del barrio Libertador; la avenida Santa Rita; la carrera 15 con calle 18, cerca al asilo; la calle 16 con carrera 4, esquina de la catedral; y la calle 29c # 17b-58, en la Urbanización el Río.
Finalmente, el Dadsa invita a la ciudadanía a seguir reportando estos casos a través de las redes sociales de la entidad o comunicarse con la Policía Ambiental, el Cuerpo de Bomberos, la Essmar y la empresa A-ire.