La crisis por la suerte de los cadáveres en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil continua pese a los esfuerzos de las autoridades por recolectarlos y en medio del desconsuelo e incertidumbre de los familiares.
Tras las impactantes imágenes en redes sociales de cadáveres en calles y domicilios de Guayaquil, colgadas por familiares desesperados ante la falta de respuesta de las autoridades para proceder a su levantamiento, el Gobierno y el Municipio han coordinado una respuesta en los últimos dos días que, sin embargo, no ha logrado acabar con esta situación.
En la mañana de este sábado en el barrio norteño de Sauces 8, un cadáver fue dejado sobre un mueble en el parterre central de una avenida con el letrero “Hemos llamado al 911 y no hay ayuda”.
Después del mediodía un equipo de agentes de Control Metropolitano de Guayaquil, que intervienen en las labores de levantamiento junto a una fuerza especial del Ejército, recogieron otro cuerpo en Sauces 5 y lo trasladaron al cementerio de Jardines de la Esperanza.
Se trataba de un fallecido hacía más de un día y que tampoco pudo ser recogido en su vivienda. Las autoridades fueron alertadas por los vecinos, que denunciaron que la madre de la víctima, una mujer mayor, permanecía en la casa junto al cadáver.
De acuerdo a un comunicado del Ayuntamiento, ese último cuerpo fue introducido en un féretro.