La canina de cinco años fue hallada al interior de una caja y con bolsa en todo su cuerpo. Además, estaba embarazada, con la mandíbula rota y con una oreja cortada.
La perra, quien responde al nombre de Maggie, fue hallada por una persona que publicó su historia en las redes sociales y de esta forma llegó hasta Kasey Carlin, una británica que ama a los animales.
Carlin decidió armar una campaña para recaudar fondos y trasladar a la perra hasta su ciudad, Brighton, informó The Argus, un periódico local.
La mujer anunció en su cuenta de Facebook que Maggie, quedó ciega a raíz del maltrato que sufrió, fue operada en el Líbano antes de viajar a Reino Unido, donde por primera vez tocó el pasto, según el medio de comunicación de ese país.
Según Kasey, a pesar de toda la tortura que padeció Maggie, ella “nunca lastimó a nadie” y es muy “amorosa”. De hecho, ahora se dedica a la canoterapia, una técnica que “busca la rehabilitación de personas con discapacidad física, mental o problemas emocionales”, a través de la compañía de perros adiestrado.
De acuerdo a la información entregada por el portal Pulzo.com, la canina es una estrella de Instagram: tiene su propia cuenta verificada y la siguen más de 108.000 personas.