La condena tiene que ver con las irregularidades halladas en un contrato suscrito en 2006.
Ante el material probatorio presentado por la Fiscalía, el Tribunal de San Gil, Santander confirmó en segunda instancia la condena proferida de 64 meses de prisión en contra de un exalcalde por su responsabilidad por los delitos de contrato sin cumplimiento de requisitos legales.
El exmandatario fue identificado por las autoridades como Roque Julio Vargas.
La condena tiene que ver con las irregularidades halladas en un contrato suscrito en 2006, por un monto de un 1’683.000 pesos, el cual tenía como objetivo el suministro de materiales e instalaciones eléctricas en una vivienda ubicada en el corregimiento de Berbeo.
El Tribunal absolvió al ex burgomaestre por el delito de peculado por apropiación.