Están “en peligro crítico” en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Colombia y otros 13 países firmaron este martes una declaración en Bogotá que busca desarrollar un plan de acción para proteger los delfines de río que viven en sus naciones, especies que están en peligro y necesitan medidas para su conservación.
“La conservación de nuestras especies es una de las prioridades del Gobierno del Cambio, por eso nos hemos unido para hacer un llamado global sobre la urgencia de tomar medidas concretas enfocadas en la protección de los delfines de río. Seremos varios gobiernos comprometidos en este propósito”, aseguró la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, al referirse a la Declaración Global para la Conservación de Delfines de Río, firmada en la capital del país.
Este anuncio se da en un momento crítico para todas las especies de delfines de río en el mundo, algunas de ellas clasificadas como “en peligro” o “en peligro crítico” en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
De hecho, hace unos días se conoció que más de 150 delfines de río aparecieron muertos en el lago Tefé, de Brasil, como consecuencia de las fuertes sequías en la Amazonía, de forma que su protección es una “urgencia global”.
“La crisis climática, sumada a las presiones humanas, como la pesca ilegal, la minería y la contaminación de su hábitat está impactando gravemente a estas especies, pero sobre todo a poblaciones enteras, cuya supervivencia depende de la buena salud de los ríos”, afirmó la directora de Relaciones de Gobierno y Asuntos Internacionales de WWF Colombia, Ximena Barrera.
Durante el evento participaron organismos multilaterales, organizaciones de la sociedad civil, sector privado, comunidades locales y pueblos indígenas, con el objetivo de socializar casos de éxito en el cuidado de los delfines de río y sesiones de trabajo entre Asia y Suramérica.
Además, los delfines sirven de gran ayuda para medir la conservación de grandes cuencas hidrográficas, algo que valoró el director de la Fundación Omacha, Fernando Trujillo, quien explicó que “permiten implementar acciones de ordenamiento territorial y evaluar amenazas como contaminación, deforestación, cambio climático y pérdida de conectividad de los ríos”.
Barrera destacó “el liderazgo de Colombia” y la voluntad de los otros 13 países donde hay delfines de río para establecer “acciones inmediatas y de largo plazo” para enfrentar al peligro que tienen estas especies.
EFE.