La final fue un duelo de ingleses entre el Manchester City de Guardiola y el Chelsea de Thomas Tuchel.
El partido tuvo la particularidad de volver a tener aficionados en el estadio, por las medidas ya tomadas en Portugal. El encuentro se disputó en el estadio del Porto, el Do Dragão. Ambos equipos salieron con un ‘XI’ titular de lujo y con su respectiva camisa azul, sólo diferenciada por los tonos. El City con su azul cielo y el Chelsea con azúl rey.
El Manchester City estaba en búsqueda de su primera Champions League, mientras que el Chelsea es un viejo conocido de la ‘Orejona’, pues se había coronado ya campeón de Europa en la temporada 2011/12.
Una final más táctica que jugada fue lo que se vio en Portugal, ninguno de los dos equipos tuvo una gran superioridad sobre el otro y fue la efectividad lo que le entregó el título al cuadro de Tuchel. La jugada más clara del partido terminó en el único gol del encuentro, y luego de eso hubo poca opción contundente de gol.
El tanto del Chelsea se dio gracias a la salida rápida del arquero senegalés Edouard Mendy. Su salida posteriormente le caería al inglés Mason Mount, que con una genialidad de asistencia se lo entregó al alemán Kai Havertz, que sin dudar eludió al guardameta del City y anotó el gol del título al minuto 42.
Con este nuevo campeonato el Chelsea vuelve a ser ‘Rey de Europa’ luego de 9 años sin conseguirlo. De esta manera los de London igualan en cantidades de Champions League a la Juventus, el Benfica Nottingham Forest y el Porto, todos con 2 títulos.
El fútbol le dio revancha a Tuchel y a Thiago Silva, quienes perdieron la final pasada contra el Bayern Munich. Por su parte la ‘Orejona’ sigue eludiendo a Pep Guardiola, que aunque sus equipos siempre juegan bien, sólo ha conseguido ganar la liga de campeones con el Barcelona.
Por: Pablo Esteban Gómez Linero