Además de este lamentable suceso, fueron estafados por un supuesto vendedor de hospedajes.
Tras el incidente en Playa Cristal este domingo, se siguen revelando casos que evidencian irregularidades en la práctica del transporte marítimo en Santa Marta.
Esta vez, se conoció que, el pasado sábado, un día antes del naufragio en el que murieron dos mujeres, un grupo de barranquilleros casi pierde la vida cuando la lancha en la que viajaban se quedó sin gasolina a la mitad de la nada, en el sector de Playa Cristal.
El festejo por el cumpleaños de uno de los jóvenes casi se convierte en el lamento por la muerte de los 14 turistas que navegaban en la lancha.
El viaje lo tenían programado hace un mes y su destino era Playa Cinto, un lugar exótico que se ubica, más allá de Playa Cristal.
Camino a su destino, había fuertes vientos y corrientes fuertes en el mar. Sin embargo, lograron llegar.
El problema se presentó en el viaje de regreso, según el relato, las olas eran mucho más grandes, aproximadamente de 3 metros, obligando a que la lancha ejerciera más velocidad y fuerza, lo que provocó el desgaste de combustible.
Esto sucedió en la zona marítima que limita con Playa Cristal, una de las jóvenes relata que, en medio de la angustia, el capitán de la embarcación les pedía calma y les decía que ya otra lancha vendría a rescatarlos.
“Duramos como 30 minutos varados, yo pensé que íbamos a morir, teníamos chalecos salvavidas y todo, pero era imposible quedar estables en alta mar entre esas olas tan gigantes”, cuenta una joven.
En medio de los fuertes vientos y las grandes olas que estremecía la embarcación por fin llegaron a rescatarlos. Los jóvenes terminaron golpeados y lesionados, presentando traumatismos, raspaduras y moretones en distintas partes del cuerpo.
Al llegar a tierra se enteraron que la Dimar había restringido los viajes por vía marítima ese día, producto de las condiciones climatológicas, sin embargo, nunca fueron informados por parte de la agencia.
Ajeno a este hecho, se suma otro infortunado suceso para estos jóvenes, ya que comentan que fueron estafados por una persona que se hizo pasar por arrendatario. Un sujeto les habría alquilado una supuesta casa en el Centro, pero al consignar el 50% de anticipo dejaron de responder a los mensajes.