La veeduría ciudadana urge por acciones inmediatas y definitivas para contener el fenómeno que sigue amenazando a esta zona turística.
Más de un año transcurrió desde que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) ordenó suspender las obras para frenar la erosión costera en Playa Salguero y el proyecto sigue estancado; lo peor, es que no tiene esperanza de solución en el corto plazo.
Por lo menos así lo percibe la veeduría para la mitigación y solución a la problemática de la erosión costera en Playa Salguero, que, con preocupación, nota el poco interés gubernamental para que el proyecto avance y ofrezca la solución definitiva a esta grave problemática.
“Todo está parado, nadie responde, nadie dice nada… No sabemos qué va a pasar y se requiere que se hagan efectivas las pólizas de cumplimiento. Lamentablemente ni los órganos de control, ni la administración parece no interesarles”, afirma Arieh Kaplan Guberek, miembro de la veeduría.
Desde un principio, los veedores advirtieron sobre las falencias del contrato de obra 003 del 2023 entre la Alcaldía de Santa Marta y la Unión Temporal Protección Costera Playa Salguero, suscrito en el marco de declaratoria de calamidad pública ante el inminente riesgo en que se encontraban las edificaciones ubicadas a orilla del mar en ese sector y el perjuicio para la explotación turística de la zona.
“Es un contrato de 25 mil millones, al cual se le hizo un anticipo de 8 mil millones y no sabemos cómo se utilizó. También observamos que el interventor de la obra es pagado por el mismo contratista, es un contrato que tiene todas las falencias. El resto de la plata está en una fiducia, según la Secretaría de Hacienda”, manifestó Kaplan Guberek.
También explicó que dentro del convenio se especifica que los contratistas deben solventar los permisos, tanto la licencia ambiental de ANLA, como el de la Dimar de ocupación de playas para desarrollar las obras.
“Hace tres meses realizamos una mesa de trabajo en la Procuraduría Ambiental del Magdalena con representantes de ANLA y varias secretarías de la Alcaldía, el compromiso era presentar un informe de impacto ambiental. Hace un mes radicamos un derecho de petición ante ANLA y respondieron que no lo han presentado”, señaló el veedor.
De este proyecto solo se ejecutó una parte antes que la obra fuera suspendida por la ANLA. “El espolón y medio que se alcanzó a construir, si bien ha generado algo de playa, no es la solución definitiva, ni lo contractualmente establecido”, enfatizó la veeduría.
Inversamente proporcional al estancamiento del proyecto avanza el fenómeno de la erosión costera, por lo que la veeduría advierte que si no se ejecutan las obras de contención continuarán las afectaciones económicas y sociales en Playa Salguero; de ahí su insistente llamado para que se actúe a tiempo y se evite un desastre mayor en esa zona que sigue marcando un potencial de expansión residencial y turística para Santa Marta.
