Conozca los seis municipios con mayor afectación.
Una grave realidad reveló en las últimas horas un informe del Instituto Nacional de Salud (INS). Se trata de una crisis de desnutrición que afecta a al menos 520 menores de edad en el departamento del Magdalena.
Este problema ha puesto en evidencia una situación de extrema vulnerabilidad, particularmente en el estrato 1, donde las limitaciones económicas de las familias agravan significativamente la situación.
De acuerdo con la información del INS, los menores de edad en esta región enfrentan riesgos severos para su salud debido a la falta de acceso a una alimentación adecuada. La desnutrición, además de comprometer el desarrollo físico y cognitivo de los niños, aumenta su susceptibilidad a enfermedades y afecta negativamente su rendimiento académico.
En consecuencia, los municipios más afectados incluyen Santa Marta y otras localidades como Plato, con 93 y 71 casos reportados respectivamente. Le siguen El Banco con 60 casos, Fundación con 38, Ciénaga con 33 y Zona Bananera con 30 casos.
Entre los más vulnerables se encuentran las niñas menores de 5 años, quienes representan el 59% de los casos en general y alcanzan el 79% en algunos municipios específicos.
Las causas de esta crisis de desnutrición están estrechamente ligadas a factores socioeconómicos como la pobreza extrema, la falta de acceso a alimentos nutritivos, la falta de educación alimentaria adecuada y las deficientes condiciones de saneamiento básico en muchas áreas del departamento.
Además, un informe del Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario sitúa al Magdalena en el puesto 16 de los 32 departamentos del país en términos de competitividad. Con una puntuación de 4,98 sobre 10, el departamento ha experimentado un retroceso de 0,3 puntos, particularmente en áreas críticas como la educación básica y media, así como en la sofisticación y diversificación económica.
Esta combinación de factores socioeconómicos y de competitividad subraya la urgente necesidad de intervenciones por parte de las autoridades locales y nacionales.
Cabe anotar, que la desnutrición infantil no solo compromete el desarrollo físico y cognitivo de los menores, sino que también genera repercusiones a largo plazo en el bienestar y la productividad de toda la comunidad.