Ideam solicitó a las autoridades tomar medidas para prevenir desastres.
Ante el inició de la temporada de huracanes este primero de junio, el Ideam y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres hicieron un llamado a las comunidades del Magdalena, La Guajira y el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina para que adopten medidas de seguridad y prevención.
Por medio de un caomunicado, el director general de la Ungrd, Carlos Carrillo, anunció que la temporada de huracanes comenzará el próximo mes y se mantendrá hasta el 30 de noviembre. Según la Unidad, La Guajira y el archipiélago de San Andres, Providencia y Santa Catalina son zonas de amenaza directa.
“Tenemos una preocupación con los refugios en el Archipiélago. Vamos a implementar unos temporales, pero de los cinco que tenemos de manera permanente parece que no están en las condiciones óptimas para enfrentar la temporada. Con la comunidad haremos unos estudios estructurales para tener la certeza de que sí van a resistir”, detalló Carrillo.
Así mismo, el funcionario solicitó a las poblaciones de Magdalena, Sucre, Córdoba, Atlántico y Chocó a mantenerse alerta, pues, a pesar de no tener riesgo de un impacto directo, sí pueden recibir afectaciones derivadas, como fuertes vientos, inundaciones, movimientos en masa y avenidas torrenciales.
Carrillo recalcó que actualmente hay cerca de sesenta mil toneladas de residuos sólidos en Providencia por las obras de reconstrucción tras el huracán Iota, e indicó que se cuidará de manera especial ese material antes de que llegue un posible ciclón.
“Este es un compromiso de la Unidad en el que estamos trabajando desde el primer día que llegó esta dirección”, declaró Carrillo. La Ungrd hizo un llamado a las comunidades a estar pendiente de los canales de comunicación en los que se difunden los mensajes de alerta y recomendaciones para salvaguardarse.
La temporada se extenderá hasta el 30 noviembre de este año, y se espera que se intensifique en septiembre y octubre.
Las regiones de Magdalena, Sucre, Córdoba, Atlántico y Chocó también podrían verse afectadas por eventos derivados como fuertes vientos, inundaciones, movimientos en masa y avenidas torrenciales. Esta misma situación puede presentarse en el resto del país debido al incremento en la intensidad de las lluvias.